Solo llevo corriendo desde septiembre de 2011,
solo llevo desde entonces 612 kilómetros acumulados,
solo 39.000 kcal quemadas...
y solo
Mónica, Celso, Carlos y Alberto
han hecho que todo lo que siento y sentiré se vea reflejado en su locura.
Que gran envidia!
Gracias por compartir con nosotros vuestra aventura en la Transvulcania.
Gracias Mónica por tu estupenda crónica
(que acontinuación reproducimos).
(también os adjunto enlace de crónica de Alberto: CDE Runners de Barrio )
A disfrutar!!!
YA DE VUELTA, OS DEJO MI CRÓNICA DE LA TRANSVULCANIA, ISLA DE LA PALMA, 2012. a disfrutarla...
yo, Mónica Camacho Fernández, me siento profundamente orgullosa de estos 3 zumbaos.
lo cual no quita, nimuchomenos, que no hubiera momentos en estos 3 días en que no los hubiera despeñado por algún acantilado de la isla. mi complejo de perro ovejero, natural a mi idiosincrasia, se vió multiplicado por mil: tienes que cuidarlos, mantenerlos juntos y morderles el zancajo (el talón de Aquiles para los no extremeños) si alguno se despista. tuve que luchar con la naturaleza interplanetaria de Celso, el monserguismo ultra pesimista de diesel y la natural tendencia de Alberto a comer-tweetear-hablar-fotograf
consigo meterlos en el coche que acabo de alquilar, llevarlos al hotel que reservé y nos dan las habitaciones VIP, las de los que van a morir te saludan, las de la ultima voluntad o qué quiere cenar antes de sentarle en old Sparky. flipan y ríen (incautos, pienso yo) les llevo al restaurante que llevo pensado de casa pero dejo que coman solitos, diesel se achucha una birra y es otro, hasta se congratula de estar allí (que dure...), venciendo el sopor horrible, subimos al coche a cruzar la isla a por los dorsales, y allí reviven, la adrenalina y la testosterona alcanzan un perímetro de varios kilómetros, ven el arco de meta con el reloj en countdown y les brillan los ojos, quieren fotos, piensan que a lo mejor mañana ni lo cruzan. dios! el photocall! más fotos, mira! es kilian! (fotos). nos queda mucho por preparar así que a morder pantorrilas y llevarlos a la fila de los dorsales: y esto qué es? esto para que sirve? mi taza está rota... me haces una foto con la bolsa? claro bonito...VENGA!! a subirlos al coche que mañana el madrugón será satánico.
de regreso al hotel, paramos a hacer un poco de compra, el caos asoma la patita, pero consigo reunirles frente al mostrador de la charcutería...la vida me tiene preparado un quiebro: la dependienta se enrolla más que un jubilado en una obra con todos y cada uno de los clientes que nos preceden, eso unido al ritmo insular (creo que hay tesis doctorales que hablan de este fenómeno) hace mella en la moral del equipo: se me cargan las piernas...me hago pis....queda mucho?... jó...qué hago aquí? aquí no va el FB... madre mía, señora, que se va a cargar el entrenamiento de todo un año! acelere!
ya tenemos la compra...al hotel volando! ahora a prepararse todo lo de mañana. les dejo a su bola y me dedico a estudiar el mapa de la isla para poder seguirles lo mejor posible...JO-DER!! voy a hacer más kilómetros que Kunfú..pero claro, tampoco es plan de hacer semejante observación delante de ellos (nosésimentendeis). el plan es: les llevo a la salida, me vengo al hotel a dormir un par de horas, subo al Roque de los Muchachos y bajo a los Llanos de Aridane.
pues ale, a cenar y a dormir...
las putas 3 de la mañana! pero que coj...venga va, que no decaiga la cosa..les veo despiertísimos, con el corazón acelerado y los movimientos torpes, engullendo piña sus caras son un poema, pero yo les quiero infinito porque de ahí para delante, van a sufrir...se ajustan las mochilas y al coche.
llegamos a Fuencaliente y allí ya hay cientos de zombis con mochila técnica, bastones y frontal (la santa compaña pienso). hace un viento que flipas y diesel tirita de frío y acojone a partes iguales, le pongo el cortavientos y le abrazo, venga diesel, que en nada y menos sale el sol y te calienta (nota mental: cuidado con lo que se desea, hay que especificar grados cuando se desea calor). se animan con otro chute de adrenalina y allí les dejo porque me echan, la salida está próxima. subo un repecho y espero verles pasar. sólo veo luces, sin cara, se acaban las luces..se acaba la gente.
vuelvo al hotel y duermo un poco, sobresaltada, pensando en ellos, en su subir y subir. cojo el coche y al roque, llego a tiempo de ver a Killian pasar, le animo a voces y al siguiente y al siguiente y así a no menos de 300 corredores, algunos me lo agradecen, otros me sonrien otros bromean, me echan piropos, otros no me entienden. me siento orgullosa de poder hacer algo por ellos y ellas. en mi experiencia, unas palabras de aliento en ciertas circunstancias te dan la vida. otros, como niños perdidos me echan los brazos y yo les abrazo: estoy sudado, de qué? jijiji sieskemeparto. de andar subiendo y bajando collados soy la persona que sale en más fotos de transvulcania, en las cuales, estudiadas con detenimiento, se puede observar la progresión de mi achicharre de brazos, gemelos, cepa de las orejas y pescuezo.
Y POR FIN SUDCEDE del fondo de un collado música celestial: "qué pasa chikitina?!" mi pequeño lo ha conseguido, ha llegado hasta el Roque, hasta mi. corro como una loca a abrazarle y a besarle. cómo estás?, bueno, cansadete" grande este Celso. le doy un concentrado de consejos que me saco de yoquésédonde porque no tengo ni idea de aconsejar gente en pleno deslome y un concentrado de amor que surte efecto: ya lo tienes hecho, cariño. "lo sé". y con estas 2 palabras me deja tranquila, sé que va a cruzar la meta.
al poco aparece el corredor más fashion, menos sucio y más maqueao de todos, diesel, que sprinta al verme y me hace reir. está físicamente y sicológicamente entero, enterísimo. también sabe que ya lo ha conseguido. está de subidón. me lo como a besos y le mando seguir.
y aquí llega el punto más negro de mi crónica: por motivos logísticos (había que sacar los coches de la zona del observatorio astrofísico), no pude ver pasar a Alberto, lo cual aún me entristece infinito. LO SIENTO PRESI, DE VERDAD.
cojo el coche hacia los LLanos, allí me planto en meta a ver pasar gente y de paso me aprieto un plato de paella cortesía de la organización. tras largo rato AHÍ ESTA es Celso, feliz, sonriendo, sintiéndose triunfador, levantando los brazos, casi llorando...CLICK! el círculo se cierra, proyecto vital conseguido, ha cruzado la meta de día, su máxima ilusión. le sigo por las vallas, le grito, ni siquiera me oye, tal es su felicidad, lo inunda entero. por fin me ve...qué orgullosa me siento. da unos cuantos traspiés, se atolondra. se quita las zapatillas, se lava, se ríe, pasa media hora así, con la adrenalina a tope, el tiempo se ha detenido para él en ésa algarabía. disfruta pequeño, te lo has ganado! cuando baja a la tierra le llevo a comer y a descansar lejos del tumulto, no te muevas que voy a vigilar si llega diesel, descuida, que de aquí no me meneo...
pero necesita moverse porque los tirones asoman la patita, así que desandamos camino para encontrar a diesel, por fin.
aparece. pletórico, triunfal y muy entero, el otro diesel, el que por lo bajini confiesa sentirse orgulloso de sí mismo, el que sabe que la ilusión te da alas, el que cruza los arcos de meta.
ya sólo nos queda Alber, que aparece al poco, esprinta como un demonio por la alfombra roja de llegada a meta, va grabándolo todo, entrevistándose a si mismo, a los organizadores, a mí, a todos. está feliz, los ojos húmedos y la sonrisa imposible de borrar. sin respiro llama a su adorada Jennifer y le cuenta la gesta, love is in the air...
¿sentí envidia de ellos? pues la verdad es que me forcé a ello, pero sin éxito, porque esta prueba no está, de momento, a mi alcance. así de sencillo. lo que me llegó al alma fue que muchos de los que habían sido victimas de mis gritos de ánimo, me reconocieron en la llegada y me lo agradecieron. quid pro quo, monik
ahora toca acopio extra de paciencia. ellos están exhaustos, y aunque sus cerebros emulan al de una persona normal, coordinan lo justo, y se mueven despacio, me necesitan (es lo que me gusta pensar). los reuno varías veces y otras tantas se dispersan, me dan ganas de atarlos entre si. al final consigo llevarlos al hotel. nos duchamos, reímos, recordamos, volvimos a recordar, cenamos y a descansar.
al día siguiente bañitos en la pisci y relax absoluto. quick brunch y al aeropuerto, escenario dantesco de pies ampollosos, nucas achicharradas, brazos con raspones, y éso si, todos uniformados con su camiseta FINISHER de la transvulcania, tan ansiada, que tan bien sienta al cuerpo y al alma.
Lo dicho, orgullosa de mi equipo, de su gesta y de haber soportado mis mangoneces y autoridad. OS QUIERO Y...LO VOLVERIA A HACER!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario